¿Buscas algo único? Esta podría ser la cosa más guay de la que nunca has oído hablar

Buscas algo raro.
No raro porque sea caro, sino raro porque es real.

No otra tendencia de diseño.
No otro objeto que olvidarás al cabo de una temporada.
Quieres algo que detenga a la gente. Algo con presencia.

Lo que buscas puede ser madera petrificada.

Piedra que una vez fue madera: un árbol que se convirtió en mineral a lo largo de millones de años.
Fosilizada por la naturaleza. Moldeada por el tiempo. Ahora descansan tranquilamente en cuencos, bandejas y soportes que parecen esculturas, pero que viven en tu casa.

No son antigüedades.
Son el tiempo mismo, en tus manos.

¿Qué es exactamente la madera petrificada?

La madera petrificada se crea cuando un árbol, enterrado bajo sedimentos, es sustituido lentamente por minerales como el cuarzo, el hierro o la calcita. A lo largo de miles (a menudo millones) de años, la madera se disuelve y la piedra ocupa su lugar, célula a célula. Lo que queda es una huella geológica perfecta de la forma original.

Cada cuenco, bandeja o portavelas de nuestra colección está tallado en esa piedra.

Por qué lo quieres en tu espacio

Porque la mayoría de la decoración es decoración.
Pero la madera petrificada es conversación, sustancia y prestigio silencioso.

Estas piezas funcionan en espacios que valoran la sobriedad:
una bandeja de piedra mate sobre una mesa de travertino,
un escultural portavelas que descansa sobre lino crudo,
un cuenco tallado que atrapa la luz sobre una estantería de roble.

Utilízalos. O no.
Su presencia es suficiente.

Y si lo haces, descubrirás que son increíblemente funcionales:

• Bandejas que cubren una mesa o sostienen incienso con estilo.

• Cuencos que recogen objetos cotidianos con gravedad y gracia

• Soportes reversibles para velas, incienso o quietud escultórica

Descubre toda la colección de madera petrificada

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